Los extremos siempre son malos, por eso aquella mujer que es melosa hasta el punto de empalagar, genera cierta incomodidad en su pareja y en las personas que ven esas manifestaciones en público. Al otro lado está la persona que se pasa de ‘coqueta’ para mostrar sus atributos, para romper el hielo con cualquier extraño o entregarle el teléfono a la primera persona del sexo opuesto que le presenten. Pero en un punto medio está la coquetería.
La coquetería es la expresión de feminidad que le da a la mujer una magia especial. Algunas pueden ver la coquetería como la forma de expresarse mediante una sonrisa o mirada con toque angelical. Otras por el contrario le dan a la coquetería un halo de misterio que le deja a la otra persona un interés por conocerla. Y está la coquetería que va ligada a la sofisticación. Ser coqueta al lucir una prenda, al mover su cabello, al caminar, al sentarse, al hablar. Lo cierto es que cada mujer utiliza la coquetería a su manera en la etapa de la conquista, pero muchas veces allí se queda. Se les olvida seguir siendo coquetas con su pareja, en su matrimonio. Por eso es importante que aprenda las mejores armas de la coquetería, pero eso sí, no se pase de la raya pues podrían tacharla de mujer fácil.
SE ESTÁ PASANDO DE LA RAYA SI ...
• A pesar de que no le gusta esa persona usted le sigue dando cuerda.
• Se ha ganado varias miradas acusadoras de las novias de sus amigos por su actuar.
• No sabe diferenciar un hombre comprometido de un hombre soltero y sin compromiso.
• Ha enamorado a varios hombres y están detrás de usted pero los toma como juego.
• Es usted una persona que utiliza la coquetería para llenar un vacío. Utiliza las caricias sin
ninguna justificación con sus amigos, niega a su pareja y se ilusiona fácilmente con otras.
• Tiene pareja pero le gusta tener por lo general amigos hombres que le estén admirando. Esto
no le está dando a su relación la estabilidad que merece.
• Utiliza la coquetería para competir con otras mujeres.
• Utiliza miradas, expresiones o posturas para proyectar una imagen vampiresa.
• Está subestimando a los demás.
• Está pasando por antipática y de paso ya está generando chismes sobre usted.
EN DONDE SE ESCONDE LA COQUETERÍA
1 En un buen baile.
2 En una mirada sin palabras.
3 En saber jugar con su cabello.
4 En el caminar.
5 En una sonrisa pícara.
6 En el tono de la voz.
7 En lucir un vestido con elegancia.
8 En su maquillaje
9 En la feminidad con que se expresa a los demás.
10 En la forma de sentarse, de comer.
11 En saber lucir tanto una minifalda como un abrigo o un sastre.
12 En el lenguaje que usa y la forma como se expresa y se da su lugar.
13 En la actitud, en la seguridad con la que se conduce.
TENGA EN CUENTA NO CAER EN EXCESOS
1 No necesita exhibirse para robarse las miradas. Sobreactuar puede llevarla al ridículo social.
2 No necesita ofrecerse a hablar con otra persona del sexo opuesto y sonreírle a todos por igual
para llamar la atención.
3 No necesita actuar como si no supiera hacer nada y necesitara la ayuda del sexo opuesto para
que todos estén a su alrededor.
4 No necesita parecer poco inteligente para cumplir esa frase errada de “todas las bonitas son
tontas”.
5 No necesita fingir una imagen para parecer atractiva. Así sólo logrará una falsa postura.
6 No necesita fingir su voz para que parezca sexy. Esto sólo le regalará una imagen de mujer
fácil.
La coquetería va ligada al ser humano, es parte de la comunicación no verbal, en especial por la mujer, pues nosotras tenemos mayor posibilidad de usar el leguaje corporal, y más si se trata de seducir, llamar la atención o simplemente es parte de nuestro comportamiento innato, pero generalmente es el arma que más usamos para atraer al hombre. La mujer usa su cabello largo para moverlo, las miradas, los gestos, la sonrisa, los movimientos suaves de manos, la forma de caminar, la forma de moverse, entre muchas más para conquistar y gustar, pues todo hace parte de la atracción física.
El leguaje corporal nos delata y habla por sí mismo, aveces sin darnos cuenta estamos comunicado muchas cosas, desde agrado, disponibilidad o rechazo. El hombre también coquetea, pero lo hace en menor proporción y lo hace bajo otros estándares de masculinidad, pues ellos usan más el lenguaje verbal para conquistarnos.
Es necesario seguir siendo coqueta con la pareja, ya que la falta de seducción constante hace que la relación se enfríe y pierda ese toque mágico natural de atracción, pues todo parte de lo que ya tenemos seguro, entonces no me esfuerzo y es un error. Las mujeres dejan en ocasiones morir algo que inclusive se da de forma natural, que le queda fácil, que puede acentuar para reactivar su relación de pareja, es el inicio de la atracción sexual, por ello no se debe perder el juego romántico de conquistarnos el uno al otro, de permanecer dispuestos para amar a nuestra pareja en todo tiempo. Definitivamente sí es súper importante mostrarle a nuestra pareja ‘aquí estoy’, me gustas, antes de que sus miradas se desvíen en otras personas sin recato. Los hombres son muy visuales, y por ahí están muchas mujeres que se pasan de la raya.
La coquetería pierde su sentido y envía otro tipo de mensajes, cuando es muy exagerado pierde la magia femenina, cuando los fines son seducir a una persona comprometida en una relación de pareja estable y abiertamente me dispongo a ser infiel y manipular la situación. Cuando envía lenguajes de sexo o encuentros fáciles. Cuando el leguaje corporal del hombre no manifiesta interés por uno. Cuando me muestro como no soy.
La coquetería es buena mientras los dos sepan que es un juego establecido por las dos partes. Se trata de no pasar el límite, de no pasar por encima del otro, de no ser coqueto con otra persona ajena a mi pareja. Ese juego de coquetería debe ser muy privado, debe permanecer en la pareja esos detalles que siempre los atrajeron, desde el perfume hasta la forma como lucía su cabello. Muchas personas tienen una pareja estable y empiezan a descuidarse, dejan de maquillarse, no se arreglan para la pareja sino para una fiesta. Se les olvida la pareja, satisfacer la vista de esa persona especial. Lo importante es saber entrar en un punto de complacencia sin desistir de las cosas personales. Cuando nos pasamos de la raya es cuando le falto el respeto al otro, cuando coqueteo con el otro, cuando a pesar del comentario de mi pareja y su incomodidad hacia mi forma de coquetear, no le presto atención o pongo freno. Eso pasa con personas que están acostumbradas a que miren a su pareja, que la admiren pero en ocasiones no establecer esos límites lleva a que la persona se irrite cuando su pareja habla con extraños.
VENTAJAS DE SER COQUETOS EN PAREJA
1 El juego de seducción se mantendrá.
2 Siempre se verá atractiva para su pareja.
3 Estará todo el tiempo pensando en sorprender a su pareja. Tomar clases de un baile que le
guste, usar las prendas de vestir que a él le llamen la atención, las miradas, la forma como a él
le gusta que lleve su cabello, etc, mantendrá siempre la llama.
4 Será una forma de recordarle a su pareja que usted está ahí. A un hombre siempre le gusta que
otros admiren a su pareja.
5 Estará enviándole constantemente un mensaje a su pareja, del por qué se enamoró de usted.
CÓMO EMPEZAR
1 Empiece por encontrar cuál es su mayor atributo físico. Resáltelo ya sea con maquillaje o con
una prenda especial. No se exceda. El primer mandamiento es gustarse a sí misma.
2 No descuide su apariencia personal, aprenda a jugar con sus accesorios, a lucir su cabello,
a mantener sus labios siempre con brillo.
3 Si va a usar tacones, aprenda a caminar con ellos.Lo mismo con cualquier otra prenda exterior.
4 La seguridad hacia usted misma juega un papel fundamental. No puede fingir ser coqueta, sino
sentirlo, y eso se lo entrega la autoimagen que tenga de usted misma. Coquetería es actitud.
5 Procure no enamorar a todos los hombres sino al que en realidad le interesa. La mirada es
fundamental, más si usted se centra en sus ojos y le dice mentalmente cuánto le gusta.
